Irán es uno de los siete países del mundo que todavía condena a muerte a las personas solo por ser gays o lesbianas, aunque esto no ha sido impedimento para que participen en el Mundial de Fútbol que se celebra en Brasil. Coincidiendo con la visita de esta selección a Salvador de Bahía, para jugar su partido de ayer contra Bosnia (que el equipo europeo ganó por 3-1), el Grupo Gay de Bahía (GGB) ha inaugurado una exposición que bajo el título ‘El infierno de los homosexuales’ quiere llamar la atención de la FIFA y de los aficionados al fútbol sobre las violaciones de los derechos humanos que se comenten en este país. “Habría que hacer como con Sudáfrica, que no participó en los Mundiales de Fútbol mientras duró el apartheid”, ha explicado el portavoz y fundador del grupo, Luiz Mott.

La muestra reúne 30 fotografías que muestran los malos tratos, lapidaciones, torturas e incluso decapitación de homosexuales en Irán. Las fotos han sido cedidas por exiliados gays a Europa y Estados Unidos, así como por la ILGA, la Asociación Internacional de Gays y Lesbianas. El GGB quiere llamar también la atención de la ONU y del propio gobierno brasileño para que no toleren ataques a los derechos humanos del colectivo LGBT. Mott también quiere llamar la atención sobre la situación en Brasil donde se contabilizaron 300 muertes por homofobia entre 2013 y 2014.